Archivodeportes.com

Fabricio Fuentes, jugador de Vélez, se siente un privilegiado por el presente que atraviesa y no pierde las esperanzas de vestir la celeste y blanca pese a tener a los dos mejores centrales del mundo por delante. Además cuenta su opaca experiencia por Europa.

Fabricio, ¿cómo fue que empezaste en el fútbol? Tu caso es parecido al de Walter Samuel: los dos son cordobeses pero se iniciaron futbolísticamente en Newell´s.

Sí, soy de la cuidad de Río Cuarto, de un pueblito de 3.000 habitantes. Ahí tuve la suerte de quedar en dos pruebas con la gente de Newell´s en el 90 y en el 91, cuando empecé en las inferiores. Después llegó el debut en el 95.

¿A qué se debe que en los últimos tiempos Newell´s ha sacado grandes defensores? Lo digo porque actualmente hay tres jugadores que se encuentran en la selección con pasado leproso: Samuel, Heinze y Quiroga. Además están los hermanos Crosa, uno en River y otro en Racing; Grabinski, vos..

Yo pienso que es porque había un especialista en ese momento como lo era Jorge Griffa, quien eligió toda esa camada de jugadores. Es un gran observador de jugadores, especialmente de defensores, debido a que él jugó en ese puesto.

Debutaste en Newell´s y te fuiste a Quilmes en la B Nacional, ¿cómo tomaste ese paso de bajar una categoría, te afectó?

No, no me afectó, al contrario. Me vino bárbaro porque yo ya había jugado en Primera y en ese momento estaba volviendo de una lesión de 6 meses. No tenía lugar porque obviamente, cuando vos perdés terreno, aparecen otros y encima habían llegado refuerzos. Justo se dio la posibilidad de ir por 10 meses a Quilmes y fue ahí donde encontré regularidad. Jugué cuarenta y pico de partidos y estuvimos cerquita de ascender. Creo que fue importantísimo en mi carrera porque fue un momento en el cual había perdido mucho terreno en Primera división. Por eso, Quilmes, un grande de la B y en este caso de Primera, me dio la gran posibilidad de jugar. No me sorprende el presente del equipo. Hay una gran institución que desde hacía años merecía estar en Primera. Actualmente es uno de los equipos que está peleando copas y muy merecidamente.

Viviste una de las historias más insólitas del fútbol argentino: te vendieron al Querétaro mexicano, debutaste contra tus ex compañeros y a la semana te avisan que estabas vendido a un club de Francia, ¿qué pasaba por tu cabeza en ese momento?

Fue como un trámite ir a México porque yo sabía que prácticamente estaba casi hecho el pase a Europa. Pero por una formalidad de presentarme en el equipo mexicano lo tuve que hacer y justo con Vélez. Y después me tocó irme a Francia con una gran alegría.


En lo futbolístico ya sabemos que jugaste 12 partidos, convertiste 1 gol, no lograste tener continuidad y decidiste regresar, ¿cómo fue el tema extrafutbolístico: la familia, la adaptación al clima, al idioma?

No la pasamos bien. Tuve algunos problemitas con mi familia. Yo jugué bastantes partidos, venía bien, me estaba acostumbrando y estaba aprendiendo el idioma. Sufrí algunos cambios normales de cuando te vas del país, donde las costumbres son totalmente distintas. Era una ciudad chica y llovía todos los días, pero por suerte se dio lo de Vélez rápidamente y como mi señora quería regresar a la Argentina, no dudé en venir.

Regresaste a Vélez y te convertiste en uno de los símbolos del equipo sin haber jugado mucho tiempo en el club ni haber ganado
campeonatos, ¿por qué pensás que se da eso?

Realmente creo que soy una persona de suerte porque acá pasaron grandes jugadores y encima han ganado títulos en momentos muy buenos. Yo simplemente hago mi trabajo, trato de matarme en la cancha y la gente me tomó un cariño especial. Realmente estoy agradecido desde el primer día hasta que me vaya porque creo que la gente me ha dado más de lo que yo le he dado a Vélez.

Hablando del tema de la selección, ¿te ves lejos?

La selección es un tema difícil, cualquier jugador que esté en Primera división sabe lo difícil que es llegar ahí. No es imposible, hay que seguir trabajando y esperar a que llegue el momento, la base está pero siempre hay dos o tres jugadores que pueden estar ahí arrimándose y porqué no puede ser alguno de nosotros.

Tenés jugadores como Ayala y Samuel en ese puesto, ¿qué tienen ellos que no tengas vos?

No, pienso que ellos están un escalón más arriba, tienen muchos años en Europa. También han ganado campeonatos, cosas importantes y tienen un nivel de juego muy regular. Es mucha diferencia, sería una linda posibilidad para ver dónde estoy parado. Pero reconozco que estamos hablando de los dos mejores centrales del mundo.

Tu pase pertenece al Guingamp, en junio en teoría tenés que volver al club.

Tengo una opción en la que puedo quedarme a préstamo 6 meses más. Lo estamos evaluando porque hay algunas posibilidades interesantes para mí, pero va a depender de la disponibilidad y lo que quieran los dirigentes de Vélez, quienes tienen la primera opción. De presentarse algo importante para mí y para mi familia se verá sobre la marcha pero la realidad económica de la Argentina le da más importancia a las ofertas del exterior, entonces por ahí buscaría eso. Igualmente imagino que a Francia no vuelvo.


Nota: Santiago Bisson y Julio Franchini.